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Monografía: El exudado en heridas

Cómo citar este documento: Paniagua Asensio M, Hidalgo Doniga C, Biarge Pacheco R, Merino Perera S. Monografía: El exudado en heridas. [Internet]. Álava: HeridasenRed; 2025 [citado «añadir día mes año»]. Disponible en: www.heridasenred.com/monografia-exudado-en-heridas

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En 2025, el Grupo Nacional para el Estudio y Asesoramiento en Úlceras por Presión y Heridas Crónicas (GNEAUPP) ha publicado un documento clave que recoge de forma detallada todo lo relacionado con el exudado de las heridas: qué es, por qué se produce, cómo evaluarlo y cuáles son las mejores estrategias para su manejo. (Descarga el documento aquí). En esta entrada compartimos solo una parte de ese contenido, centrada en los aspectos básicos y más esenciales. Próximamente, ampliaremos esta información con nuevos apartados que completarán la visión global del tema.

1. ¿Qué es el exudado de las heridas?

1.1 Introducción y definición

El exudado es un elemento clave en el proceso de cicatrización. Aunque a menudo se percibe como un problema, en realidad su presencia es fundamental, ya que proporciona un ambiente húmedo óptimo que favorece la migración de células reparadoras, la difusión de factores inmunitarios, el aporte de nutrientes y la autolisis del tejido necrótico. Sin embargo, tanto su exceso como su defecto o una alteración en su composición pueden indicar complicaciones o retrasar la cicatrización. En esencia, el exudado es la respuesta resultante de la interacción entre la etiología de la herida, la fisiología reparadora, el entorno y procesos patológicos, definiéndose, como un material compuesto principalmente por suero, fibrina y leucocitos que se exuda desde una lesión o área inflamada. (1,2)

1.2 ¿Por qué se produce el exudado?

Tras una lesión, se activa una respuesta inflamatoria caracterizada por la dilatación de los vasos sanguíneos y un aumento de su permeabilidad. Esto permite que fluidos, proteínas plasmáticas y células inmunitarias salgan del torrente sanguíneo hacia el espacio intersticial donde se encuentra la herida. El exudado procede de este líquido intersticial, que contiene agua, electrolitos, nutrientes y productos de desecho. El sistema linfático juega un papel esencial en la recirculación, ya que absorbe diariamente cerca de 8 litros de este fluido y los devuelve al sistema circulatorio como linfa. (1) Es importante diferenciar entre exudado y trasudado: el primero es rico en proteínas y células, mientras que el segundo es un filtrado pobre en proteínas. Este matiz ayuda a identificar causas sistémicas que pueden incrementar la cantidad de líquido y orientar un tratamiento adecuado.

1.3 Factores que pueden influir en la producción del exudado

La cantidad y composición del exudado dependen de múltiples factores locales y sistémicos.(1,3) La fase inflamatoria normal puede aumentar su producción, pero también lo hacen procesos patológicos como la infección, la inflamación crónica o la presencia de biopelículas. Por su parte, condiciones sistémicas como la insuficiencia cardíaca, la obesidad, la desnutrición, la hipoalbuminemia o la administración de corticoides pueden agravar el problema.

1.4 Composición del exudado

El exudado contiene agua, electrolitos, nutrientes, células inflamatorias, mediadores bioquímicos, enzimas proteolíticas como las metaloproteinasas de matriz (MMP), factores de crecimiento y microorganismos. (1) En algunos casos, si la herida está comunicada con una cavidad, puede incluir orina o contenido intestinal. Además, las heridas crónicas suelen tener niveles más altos de enzimas y mediadores inflamatorios, lo que retrasa el proceso de reparación respecto a las heridas agudas.

1.5 Importancia del pH en la cicatrización de las heridas

El pH del microambiente de la herida desempeña un papel decisivo, pues regula la proliferación celular, la actividad enzimática y la respuesta inflamatoria. (5) La piel sana mantiene un pH ácido (4-6), mientras que las heridas pueden elevarse a valores alcalinos (7,8). Este aumento favorece la actividad de proteasas, prolonga la inflamación, disminuye la angiogénesis y eleva el riesgo de infección. (6,8) Para regular el pH se utilizan apósitos acidificantes, miel (por su capacidad antibacteriana y reductora de pH) o ácidos orgánicos como el láctico y el cítrico. La monitorización mediante sensores específicos permite ajustar el tratamiento en función de los cambios del microambiente. (9-11)

BIBLIOGRAFIA
  1. World Union of Wound Healing Societies (WUWHS). Consensus Document. Wound exudate: effective assessment and management. Wounds Int. 2016.
  2. Diccionario Merriam-Webster; [Internet]. [Consultado 25 de agosto de 2025]. Disponible en: http://www.merriam-webster.com/2024. Disponible en: www.merriam-webster.com/
  3. Declaración de mejores prácticas de Wounds UK. Gestión eficaz del exudado. Londres: Wounds UK; 2013.  [Internet]. [Consultado 25 de agosto de 2025].  Disponible en: www.wounds-uk.com
  4. Falanga V. Classifications for wound bed preparation and stimulation of chronic wounds. Wound Rep Reg. 2000;8(5):347–52.
  5. Gethin G. The significance of surface pH in chronic wounds. Wounds UK. 2007;3(3):52-6.
  6. Leveen HH, Falk G, Borek B, Díaz C, Lynfield Y, Wynkoop BJ, et al. Chemical acidification of wounds: An adjuvant to healing and the unfavorable action of alkalinity and ammonia. Ann Surg. 1973;178(6):745-53.
  7. Schneider LA, Korber A, Grabbe S, Dissemond J. Influence of pH on wound-healing: A new perspective for wound-therapy? Arch Dermatol Res. 2007;268(6):413-20.
  8. Schmidt K, Klod J. pH and its role in wound healing. J Wound Care. 2014;23(8):366-74.
  9. Romanelli M, Dini V, Vowden K, Vowden P. An acidic environment and wound healing: Theoretical and clinical considerations. Wound Repair Regen. 2018;26(3):265-303.
  10. Molan PC. The evidence supporting the use of honey as a wound dressing. Int J Lower Extrem Wounds. 2006;5(1):40-54.11. Gethin G, Cowman S. Changes in Surface pH of Chronic Wounds When a Honey Dressing was Used. In: Wounds UK Conference Proceedings; 13–15 November 2006. Wounds UK, Aberdeen. 2006.
AUTORES

Ninguno de los autores declara conflicto de intereses.

Esta información va dirigida a profesionales sanitarios. Si no pertenece a este colectivo, ante cualquier duda, consulte a su enfermera/médico de referencia.

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Esta publicación es parte de la serie El exudado en heridas
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